Pago de Carraovejas

Inicios

La historia de Pago de Carraovejas es singularísima como pocas. El fundador de la bodega, JosÚMaría Ruíz, fue representante español en el primer concurso mundial de Sumilleres y a su vuelta a España volvió con la idea fija de poner en marcha su propio restaurante en el que serviría sus propios cochinillos y su propio vino. Era 1982 y en su filosofía de fondo Ruiz ya perseguía un concepto que hoy está en boga: la trazabilidad, el control de la calidad de la materia prima vinculada al origen.

La bodega

Esta impronta es uno de los signos identitarios de la que, con los años, se convertiría en una bodega exquisita y con fama mundial. El lugar elegido para la puesta en marcha de la bodega fue Ribera del Duero (que por aquel entonces no contaba con el renombre mayüsculo que tiene hoy). Ruiz, no conformándose con lo que había, además incorporó una serie de valiosas novedades: fue el primero en añadir un 25 % de Cabernet Sauvignon a la Tinto fino (Tempranillo), incorporó la utilización de roble francÚs e introdujo el riego por goteo. Su nivel de perfeccion traspasó las puertas del restaurante y empezó a atraer a los críticos y expertos del sector. El resultado fue que la demanda de los vinos Pago de Carraovejas siempre hasuperado a la oferta.

Actualidad

En 2007 se dio paso a la segunda generación, con Pedro Ruiz Aragoneses como Director General de las empresas del grupo. La irrupción de esta segunda generación implicó una modernización de los procedimientos mediante innovaciones surgidas de proyectos de I+D+i, que acabarían posicionandola marca a nivel internacional.

Si caracterizamos los vinos de Pago de Carraovejas, estos se explican a travÚs de una selección pormenorizada de su materia prima, que es controlada durante todo su ciclo de vida y para generar, a partir de las variedades Tempranillo o Tinto fino), Cabernet Sauvignon y Merlot, vinos expresivos, intensos y carnosos.